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Discusión
En una reciente encuesta realizada por la organización OCU [4] el 42% de los encuestados afirmaba utilizar el cepillo eléctrico (bien de forma habitual u ocasionalmente, alternándolo con el manual) cifra muy similar a la encontrada en este estudio.
Los cepillos son adquiridos mayoritariamente en grandes superficies, tiendas, supermercados por 7 de cada 10 españoles. En las oficinas de farmacia lo adquieren el 24% de la muestra (con mayor frecuencia las mujeres, 30% frente al 22% de los hombres). Este patrón de adquisición del cepillo es independiente del área de residencia del encuestado.
En cuanto al grado de información sobre el tipo de cepillo indicado y la técnica a utilizar, solamente el 43% reconoce haberla recibido correctamente. La inmensa mayoría (86%) afirman que es su dentista quien se la ha proporcionado, seguido por familiares y amigos (11%). Si estos datos se confirmasen, es obvio que queda mucha labor de educación sanitaria por hacer en este campo. Es reconfortante comprobar como el dentista destaca de manera muy importante como informante de referencia para sus pacientes.
La frecuencia de utilización de enjuagues bucales es sorprendentemente elevada: el 56% de los encuestados manifiestan usarlo periódicamente. Si bien ha descendido su uso con respecto al 2015 (64% afirmaba usar colutorio), no deja de ser preocupante que continúe siendo tan alta. Es necesa- rio nuevamente volver a insistir al público general sobre la importancia de no utilizar los colutorios sin indicación y supervisión del dentista. Asimismo, hay que continuar reforzando el mensaje de la complementariedad de estos productos al no ser nunca sustituto de una correcta higiene con al menos dos cepillados diarios. En cuanto a la higiene interdental, el uso esporádico de seda o cepillo interdental alcanza el 43% (49% en el estudio de OCU [4]). Sin duda alguna, la utilización diaria de estos métodos es muy inferior.
En definitiva, en la última década (2010-2020) se ha estabilizado la cifra de los que manifiestan cepi- llarse al menos dos veces al día. Los mejores y mayores niveles de educación dental probablemente han elevado el nivel de importancia de estas técnicas. A pesar de todo, continúa habiendo 2 de cada 10 españoles que manifiestan no cepillarse o hacerlo muy esporádicamente. El cepillado manual continúa ocupando el primer puesto, pero se aprecia un claro incremento de los que usan cepillo eléctrico, bien en solitario, bien alternativamente con el manual. Finalmente, subrayar la necesidad de continuar insistiendo en el uso racional de los enjuagues bucales por parte de la población española, debiéndose entender que no tiene que usarlos sin prescripción y supervisión del profesional sanitario.
3. EN RELACIÓN AL USO DE SERVICIOS ODONTOLÓGICOS
En relación a la frecuencia de visitas al dentista, el 87% de los encuestados admiten que es deseable visitar al dentista al menos una vez al año (84% en 2015 y 73% en 2010). Estos datos parecen indicar que, al menos, se va produciendo un mayor grado de información sanitaria en la población española, sobre la frecuencia deseable de visita al dentista.
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